Elia Quiroga López
“El pensamiento es aquello que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual. Por eso, puede decirse que los pensamientos son productos elaborados por la mente que pueden aparecer por procesos racionales del intelecto o, bien, por abstracciones de la imaginación», en esta artículo vamos a ver como nos influye nuestra forma de pensar en nuestra vida.
¿Qué es el pensamiento positivo?
El Pensamiento positivo es ver los hechos que ocurren desde una perspectiva alegre, enriquecedora y optimista; es la disolución del negativismo, el rechazo. Se relaciona con una actitud positiva ante la vida.
¿Tienen relación los pensamientos positivos y la salud?
La salud es el resultado del equilibrio entre cuerpo y mente. Diversos estudios han corroborada la relación que existe entre pensamiento positivo y salud física y mental. El pensamiento influye claramente en nuestro estado físico y mental.
Una persona con pensamientos negativos se va a sentir deprimida, con ansiedad, con baja motivación y con baja autoestima, por lo que será más propensa a presentar diversos trastornos. Una actitud más positiva ante la vida mejora el sistema cardiovascular y el sistema inmune; el buen humor mejora considerablemente la salud.
Las emociones positivas juegan un papel muy importante «no solo en la prevención de enfermedades sino, también, en su pronóstico, pues se logra una recuperación más rápida. Las personas que potencian emociones positivas tendrán mejores pronósticos ante una misma enfermedad que las que no lo hagan”.
La enfermedad se verá reducida o incrementada en función de cómo nos hablemos y de cómo interpretemos los acontecimientos y las circunstancias estresantes de la vida cotidiana a la vez que juega esto un papel muy importante el propio estilo de vida.
Cómo enfocarse en el pensamiento positivo
El pensamiento negativo puede convertirse en positivo. Es un proceso simple, pero requiere el tiempo y la práctica necesaria para generar un nuevo hábito. Las siguientes puntos aportan algunas pautas para transformar la forma de pensar y comportarse de manera más positiva y optimista:
- Identifica las áreas para cambiar. En primer lugar, es importante identificar las áreas de tu vida donde el pensamiento negativo es más recurrente, ya sea el trabajo, en el coche o una relación; comienza a trabajar focalizado en una de ellas y progresivamente vete avanzando en las demás áreas.
- Evalúate tú mismo. Cada tanto, durante el día, detente y evalúa lo que estás pensando. Si encuentras que tus pensamientos son mayormente negativos, trata de encontrar una manera de darles un giro positivo cambiando el punto de enfoque.
- Activa el sentido del humor. Mantén una actitud predispuesta a sonreír, especialmente durante momentos difíciles, pues ayudará a aliviar la tensión del momento. Esfuérzate en encontrar el sentido del humor en las situaciones cotidianas.
- Mantén un estilo de vida saludable. Trata de hacer ejercicio, influye positivamente en el estado de ánimo y reduce el estrés. Mantén una dieta saludable para alimentar tu mente y tu cuerpo.
- Rodearte de gente positiva. Las personas nos influimos y nos contagiamos emociones, estar con gente positivas nos enriquece y nos aporta más felicidad.
- Practica la charla positiva con uno mismo. Es importante hablarnos con respeto y agradecimiento, valorando todos nuestros puntos positivos. Sé amable y motivador contigo mismo. Si un pensamiento negativo ocupa tu mente, evalúalo de forma racional y busca lo positivo. Piensa en todo por lo tienes que estar agradecido en la vida.
Aquí hay algunos ejemplos de diálogo interno negativo y maneras de convertirlas en positivo:
“Todo lo hago mal”, “siempre lo fastidio”, “es demasiado complicado”, “no tengo capacidad”, “estoy demasiado cansada para hacer eso”, “demasiado cambio para mí”, “nadie se ha preocupado por mí”, “no voy mejorar”, “no puedo”.
“Me he equivocado la siguiente vez lo haré mucho mejor”, “esta vez lo voy a hacer diferente”, “es cierto, es difícil, pero soy capaz de hacerlo”, “la pereza no es más fuerte que yo, sí es necesario lo haré”, “me arriesgaré”, “voy a empezar yo a preocuparme por lo demás”, “lo intentaré de nuevo”, “por supuesto que puedo”.
Practicar el pensamiento positivo cambiará el diálogo interno, se reducirán las auto-críticas y se iniciará un proceso de auto aceptación.
¡Si pensamos que podemos, podremos! ¡Si pensamos que estamos vencidos lo estaremos!, ¡si pensamos que estamos enfermos nos comportaremos y nos sentiremos como tal! Todo está en nuestra mente. La actitud es la clave para afrontar cualquier situación; es mucho más importante que el pasado, el cual no podemos modificar ni cambiar lo inevitable. Lo que sí podemos transformar es el presente y nuestra actitud ante los problemas y ante la vida.
No nos convirtamos en víctimas de nuestros pensamientos; aprendamos a modificarlos para utilizarlos en nuestro beneficio y, para ello, el lenguaje que usemos es fundamental.
Aprender a generar pensamientos positivos es aprender a potenciar habilidades y recursos hacia una mejor resolución de cualquier problema, es aprender a estimular y a potenciar la esperanza, el optimismo, la motivación hacia la consecución de objetivos, la fortaleza emocional, la calidad de vida y en definitiva incrementar nuestra salud física y mental.
Los seres humanos aprendemos por repetición. Si nuestro cerebro aprende a funcionar mediante pensamientos negativos, eso es lo que volverá a hacer una y otra vez. Cuando vamos siempre por el mismo camino, llegamos siempre al mismo sitio; pero tenemos la capacidad de cambiar y generar recursos positivos que nos ayudaran a afrontar la vida desde una perspectiva más beneficiosa para nosotrxs.
Lo importante no es lo que nos ocurre, sino, cómo nos lo contamos, cómo lo percibimos, cómo lo afrontamos, cómo lo resolvemos. Las palabras que verbalizamos o que pensamos tienen gran poder para modificar nuestro estado de ánimo o nuestro comportamiento.
¡Si no podemos cambiar la situación, cambiemos nosotrxs¡ ¡Piensa como si vivieras en el mundo perfecto que quisieras vivir!
Lecturas recomendadas para ampliar:
https://www.observatoriomedicinaintegrativa.org/?s=pensamientos
https://www.observatoriomedicinaintegrativa.org/mindfulness/
Natural Medicines Comprehensive Database Consumer Version [Internet]. Stockton (CA): Therapeutic Research Faculty; 1995 Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001942.htm
J.A. Flórez-Lozano. Optimismo y salud. Catedrático de Ciencias de la Conducta. Departamento de Medicina. Universidad de Oviedo. Asturias. España http://diverrisa.es/web/uploads/documentos/optimismo/Optimismo%20y%20salud.pdf
Vazquez, Carmelo. Hervas, Gonzalo. Rahona, Juan José. Gómez, Diego. Facultad de psicología Bienestar psicologico y salud: Aportaciones desde la Psicología Positiva. Universidad Complutense de Madrid.2010
Scott W. Ventrella. El poder del pensamiento positivo en las empresas. 10 rasgos para lograr resultados óptimos. Grupo Editorial Norma. 2004
García Pérez, Mª del Carmen. Asociación Nacional de Psicología Evolutiva y Educativa de la Infancia, Adolescencia y Mayores España. EMOCIONES POSITIVAS, PENSAMIENTO POSITIVO Y SATISFACCIÓN CON LA VIDA. International Journal of Developmental and Educational Psychology, vol. 2, núm. 1, 2016.
Solaz Velázquez, Irene. ¿Qué es la psicología positiva?. 23 febrero 2018 https://www.psicologia-online.com/que-es-la-psicologia-positiva-2937.html
Dª Ana Mª Bastida de Miguel. Pensamiento Positivo, Emociones, Comportamiento Y Salud. Febrero 2018. https://www.psicologia-online.com/pensamiento-positivo-emociones-comportamiento-y-salud-2355.html
Gázquez Linares, J., Fuentes, M. del C., Rubio, I., & Inglés Saura, C. (2014). Repercusión del optimismo y de los Cinco Grandes factores de la personalidad sobre la salud de personas mayores. Universitas Psychologica, 13(3). https://doi.org/10.11144/Javeriana.UPSY13-3.rocg
Álava Reyes. M.J. (2009) La inutilidad del sufrimiento-Claves para aprender a vivir de manera positiva. La Esfera de los Libros, S.L.